
El último informe anual de Remedy confirma que Control 2 ha superado su fase de validación de concepto y ha entrado en desarrollo a gran escala, marcando un paso crucial hacia adelante para la tan esperada secuela.
El estudio actualmente tiene otros dos títulos importantes en desarrollo activo: FBC: Firebreak y los remakes de Max Payne 1+2. Aunque estos proyectos estaban en preproducción hace un año, ambos han progresado ahora a etapas de desarrollo más avanzadas. Cabe destacar que el proyecto Kestrel, anunciado previamente en colaboración con Tencent, fue cancelado oficialmente en mayo de 2023.
Todos los proyectos actuales utilizan el motor propietario de Remedy, Northlight, la misma tecnología que ofreció los impresionantes gráficos de Alan Wake 2 y lanzamientos anteriores del estudio.
En cuanto a las finanzas, Control 2 cuenta con un presupuesto sustancial de 50 millones de euros para autoedición en las plataformas Xbox Series, PS5 y PC. FBC: Firebreak le sigue con un presupuesto de 30 millones de euros, planeado para su lanzamiento a través de los servicios de suscripción de PlayStation y Xbox, junto con Steam y Epic Games Store.
Aunque los detalles del presupuesto para los remakes de Max Payne permanecen sin revelar, Rockstar Games está financiando completamente tanto el desarrollo como el marketing, asegurando que serán experiencias de calidad AAA.